Al destapar el horno comienza el viaje alquímico. La magia de la transformación  No es posible imaginar el aspecto final de la pieza jamás! al menos , con este método.  Si bien se eligen los colores, sus  combinaciones, y se manejan los tiempos del tránsito desde el horno a la viruta previendo el craquelado; el resultado de la intervención por la reducción, el shock térmico y la variabilidad de los esmaltes es insospechable...   Lo que ves al principio es muy distinto de la imagen final.  Acontece ante ti esta doble transformación: la metamorfosis de la materia por un lado y por otro la  transmutación del sentir del artesano; debiendo acomodar su incertidumbre para que el resultado no  acabe en desazón. Habrás de aceptar el albedrío, la magia alquímica del raku.   Ali
"es sólo creando que te vuelves parte de la gran creatividad del Universo"